En las sesiones de Smash, el cumpleañero es el protagonista. Este tipo de sesiones se realizan cuando el pequeño/a cumple un año, ya que necesitamos jugar con la espontaneidad, la sorpresa y la novedad. 

¡Llenamos el estudio de globos, transformándolo en una auténtica fiesta! Antes de empezar hacemos unas fotos previas con un look especial, ya sea con una corona de cumpleaños, un tutú o cualquier otro conjunto divertido. Aprovechamos este rato para hacer alguna foto con los papás y/o hermanitos. 

Cuando el/la pequeño/a ha perdido la vergüenza y comienza a sacar su ‘’verdadero yo’’, sacamos nuestro plato fuerte. Le ponemos por delante una tarta preciosa, para que haga con ella (literalmente) lo que quiera. 

Es fundamental captar las primeras reacciones para conseguir lo que esperamos, fotos diferentes y divertidas de nuestros pequeños modelos.